
El FC Barcelona continúa con su planificación deportiva en plena crisis sanitaria, social y económica por el Covid 19. Por ello, el conjunto culé espera hacer una reestructuración en todas las líneas de la plantilla para hacer un equipo mejor y pelear por todo en la próxima campaña. En todas las demarcaciones han sonado cambios salvo en la portería. Pues la secretaría técnica blaugrana ha confirmado que también habrá cambios en esta posición, colocando a Neto en el mercado, teniendo incluso a su sustituto más que elegido.
Precisamente, no es que estén descontentos con el guardameta en la Ciudad Condal, sino que el Barça necesita vender jugadores para ingresar dinero y uno de los jugadores que estará en el mercado es el portero Neto. Fichado el pasado verano del Valencia, costó 26 millones fijos y otros nueve variables (Cillessen fue traspasado a Mestalla por 35), pero apenas ha tenido protagonismo a la sombra de Ter Stegen. La directiva culé ve todo ventajas a la venta del arquero por una cifra que satisfaga las pretensiones del club., ya que la situación económica del club, unida al escaso protagonismo de Neto y a la proyección de Iñaki Peña sitúan al portero brasileño en el mercado.
Ni siquiera en la Copa del Rey, Neto ha tenido un papel indiscutible en la portería blaugrana, puesto que sólo pudo disputar el primer partido, ante el Ibiza, porque después se lesionó y no jugó ante Leganés y Athletic. Mientras tanto, la figura de Iñaki Peña cada vez coge más grandeza para el cuerpo técnico encabezado de Quique Setién. El guardameta alicantino, internacional en las categorías inferiores de la Selección, lleva en el Barça desde cadete y es un portero del estilo del club azulgrana. Seguro bajo palos, domina el juego con los pies y es el primero en iniciar el juego. Un ‘win to win’ de manual.